La selección de Qatar se confirmó anoche como el próximo rival de El Salvador en los cuartos de final de la Copa Oro, luego de vencer por la mínima a su par de Honduras y clasificarse como líder del grupo D.
Esta será la segunda vez en veinte días que El Salvador se enfrente al equipo catarí, luego de la derrota que sufrieron los nacionales 0-1 en partido amistoso el pasado 4 de julio en Pula, Croacia.
También será la segunda vez que choque en partido de competencia oficial a una selección de la confederación de fútbol de Asia, tras medirse a Israel en los Juegos Olímpicos de 1968 (entonces, este equipo estaba afiliado a dicha asociación continental).
Con el resultado, Honduras, que ya estaba clasificada de antemano, se enfrentará a México, líder del grupo A del que emergió El Salvador, mientras que la combinación de resultados deja fuera a Panamá.
En este partido, muy dinámico y con cuotas de drama en todo su desarrollo, “La H” estuvo muy a la altura del encuentro y propuso su llegadas a gol desde muy temprano, pero se encontró con un cerrojo qatarí que le impidió profundidad y que le facilitó a los asiáticos varias transiciones rápidas para inquietar a la defensa centroamericana.
Segundos después de las primeras llegadas claras hondureñas, al minuto 25 y tras una recuperación en la tómbola central, Homam Ahmed convirtió con un potente zurdazo, sin ángulo y sobre el primer palo, tras recibir en el área un pase lateral de Hassan Al-Aidos.
A partir de ahí, Honduras se volcó al ataque buscando el resultado, pero arriesgó de más en defensa y su portero Luis López tuvo que salvarla del 0-2. El meta bloqueó un mano a mano contra Almoez Ali, al 37’, y atajó al 40’ un penalti muy mal colocado por Akram Afif.
En la segunda parte, Honduras siguió insistiendo pero no encontró los espacios para el gol. Qatar siguió esperando para liquidar, sufrió poco y tuvo su recompensa en el añadido con la contra que liquidó Hatim, sin defensas que ayudaran en la labor al cancerbero López.
Por su parte, Panamá tuvo que retrasar dos horas su partido contra Granada debido al mal clima en su sede en Orlando. Cuando saltó al campo, ya estaba eliminada.
