El próximo 4 de junio, el juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador, realizará una audiencia especial de revisión de medidas del ex alcalde Ernesto Luis Muyshondt García-Prieto, para lo cual ha solicitado a la Dirección General de Migración los registros de salidas y entradas al país.
Actualmente Muyshondt es procesado en libertad por los delitos de agrupaciones ilícitas y por el delito de fraude electoral, bajo el argumento que era funcionario público; sin embargo, al no cumplir con ese requisito Muyshondt podría ser enviado a prisión preventiva.
En los días anteriores el exalcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt presumió en sus redes sociales que ha salido y entrado al país a su antojo, pese a que una de las medidas cautelares alternas a la detención le prohíbe la salida del país y el cambio de domicilio, así como firma cada 15 días en el juzgado.
La Dirección General de Migración y Extranjería (DGME), tendrá que rendir un informe especial de las salidas que ha registrado sobre el exfuncionario en el último año para determinar si habría estado cumpliendo por lo dictado en la medida que lo exonera de la prisión por la gravedad de los delitos.
“Atentamente le solicito remita dentro de las 24 horas a esta sede judicial certificación de fecha de movimientos migratorios del señor Ernesto Luis Muyshonst García-Prieto, por el período de un año calendario, a partir de mayo de 2020 a mayo de 2021, a efectos de realizar audiencia de revisión de medidas cautelares a su persona, como se lee en el documento enviado por el juzgado el viernes anterior”, señala el petitorio judicial.
El exalcalde ha salido en dos ocasiones del país, la última la realizó el pasado 22 de mayo en el que aseguró que regresaba unos días después, pero no se concretó su arribo. Previo a esa salida también hizo otra visita a tierras estadounidenses vía aérea.
La misma estrategia han realizado otros exfuncionarios y no han vuelto al país. Un caso concreto es el expresidente, Mauricio Funes Cartagena, que desfalcó al Estado con, al menos, $365 millones y ahora goza de asilo político por parte del gobierno de izquierda del régimen de Daniel Ortega y su esposa, Rosario.
