El ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, rechazó este martes las acusaciones de Estados Unidos contra su país, por hacer lo que Washington denominó “uso peligroso” del espacio exterior.
“Decir que Rusia crea riesgos para el uso del espacio es como mínimo hipócrita. No han presentado pruebas”, criticó Lavrov en rueda de prensa reseñada por medios locales.
El jefe de la diplomacia rusa instó de esta forma a Washington a dialogar sobre la militarización del espacio, en vez de “lanzar acusaciones falsas”.
Lavrov dijo, en ese sentido, que preferían “que los estadounidenses se sienten a dialogar para debatir sus inquietudes respecto al acuerdo que proponen Rusia y China para evitar la carrera armamentista en el espacio y que Estados Unidos se rehúsa aceptar”, resaltó.
A su vez, subrayó que Rusia espera escuchar una proposición concreta y argumentada, más allá de pretextos. El canciller responde así a las autoridades estadounidenses que acusaron a Rusia de derribar un satélite con un misil, algo que habría generado basura espacial.
La Agencia Espacial Norteamericana (NASA) expresó este lunes que los tripulantes de la estación Espacial Internacional (EEI) tuvieron que resguardarse en las naves acopladas ante una posible colisión de residuos espaciales.
Al respecto, el Departamento de Estado de Estados Unidos acusó a Rusia de hacer una presunta prueba de misil contra uno de sus propios satélites, lo que habría provocado la generación de más de 1.500 fragmentos de basura espacial.
Por igual, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), calificó de irresponsable la acción rusa de destrucción del satélite.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, tras reunirse con los ministros de Defensa de la Unión Europea, se quejó: “es una acción irresponsable destruir un satélite en unas pruebas. La OTAN ha desarrollado una política espacial no solo para abordar los temas espaciales, sino porque es también importante para la navegación y comunicaciones en la Tierra”.
Además, sentenció que Rusia está desarrollando nuevas armas para derribar satélites y afectar a infraestructuras básicas en tierra.
