Hombres armados raptan a una monja estadounidense de 83 años en Burkina Faso

Una monja estadounidense de 83 años fue secuestrada por hombres armados no identificados en la noche del lunes en la región Centro-Norte de Burkina Faso, confirmó hoy el obispo de la localidad de Kaya, Théophile Naré.

«En la noche del lunes 4 al martes 5 de abril de 2022, hombres armados no identificados visitaron la comunidad de religiosas de la parroquia de Yalgo en la diócesis de Kaya (capital de la región Centro-Norte)», declaró el obispo en un comunicado.
«Secuestraron a la hermana Suellen Tennyson, de la Congregación de las Hermanas Marianitas de la Santa Cruz», agregó.

Tennyson, de 83 años, residía desde octubre de 2014 en Yalgo, a unos 110 kilómetros de Kaya.
«La hermana Suellen Tennyson fue llevada a un destino desconocido por sus captores quienes, antes de irse, destrozaron las habitaciones» y «sabotearon el vehículo de la comunidad que intentaron sustraer», añadió el comunicado.

Por el momento, el secuestro de la religiosa no ha sido reivindicado, pero los ataques en Burkina Faso se llevan a cabo por grupos ligados tanto a Al Qaeda como al Estado Islámico.
Con el rapto de Tennyson asciende a seis el número de occidentales secuestrados en el Sahel central (Mali, Níger y Burkina Faso) tras el secuestro en abril de 2021 del periodista francés Olivier Dubois por un grupo afiliado a Al Qaeda en Gao (norte de Mali).

Burkina Faso sufre reiterados ataques yihadistas desde abril de 2015, cuando miembros de un grupo afiliado a Al Qaeda secuestraron a un guardia de seguridad rumano en una mina de manganeso Tambao, al norte del país, que aún sigue desaparecido.

En febrero de 2019, un misionero salesiano español y cinco funcionarios de aduanas locales fueron asesinados en Burkina Faso durante un supuesto ataque yihadista en la provincia de Boulgou, a 40 kilómetros de la frontera sur del país.

En marzo de 2019, el párroco de la localidad de Djibo (norte de Burkina Faso), Jol Wenepanga Yougbaré, de 44 años, fue secuestrado por hombres armados y, hasta el momento, su paradero sigue siendo desconocido.

En abril de 2021, dos periodistas españoles y un ciudadano irlandés fueron asesinados tras un ataque que el Gobierno burkinés atribuyó a «terroristas» perpetrado contra el convoy con el que viajaban en el este del país.

La región más golpeada en Burkina faso por la inseguridad es la de Sahel (norte), que comparte frontera con Mali y Níger, aunque el yihadismo también se ha expandido a otras áreas vecinas, y, desde 2018, a la región Este del país.

La inseguridad ha ocasionado que el número de desplazados internos en Burkina Faso ascienda ya a 1,7 millones de personas, según los datos del Gobierno.

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